Cena de empresa.....¿qué me pongo?

Hola divinos!!!

La Navidad se acerca, estamos a poco menos de un mes para que llegue la época de los regalos del amigo invisible, los adornos navideños de las casas, los encuentros con los amigos, y como no las comidas y cenas de empresa. ¡Que no cunda el pánico! Ni muy corto, ni muy largo, ni muy chillón, ni muy aburrido, ni muy alto, ni muy bajo. ¿En qué quedamos?, ¿tienes la ropa de fiesta adecuada para tal evento? O mejor dicho, la pregunta que nos formulamos todas: ¿QUÉ ME PONGO? Sabemos que es un momento muy especial y que quieres estar perfecta. Las claves para acertar con tu look es no renunciar a la comodidad y elegir vestidos que sigan tu estilo habitual. Puedes darle un toque más alegre y festivo con algunos detalles o complementos, pero lo importante es no disfrazarse. Lo mejor de estas fiestas es pasarlo bien con los compañeros y compañeras.

Hay que saber el rango de elegancia que pide tal evento, ya que esto repercutirá en todo el conjunto. Saber la ropa que se va a escoger, el peinado, el maquillaje y los accesorios (bisuteria, bolso). 

Elegir un buen vestido. Es la prenda que nunca pasa de moda y que siempre queda bien para cualquier evento. El vestido presenta tantas formas, texturas, estampados y cortes que puede combinarse con cualquier cosa. Si quieres lucir piernas, escoge un vestido corto con medias y unos tacones. Eso si, ten cuidado con no pasarse con lo corto. Los vestidos largos o midi son perfectos para estilizar nuestra figura. Como chaqueta, opta por una blazer, una chaqueta de cuero o un abrigo largo. Arreglada sí, pero sin pasarse. El 'casual chic' es una apuesta segura para estar mona, pero sin caer en el exceso. Además, el 'menos es más' se convierte en norma más que en ninguna otra ocasión. Una cosa es ir elegante y sofisticada y otra muy diferente es que todos hablen de tu escote, de las transparencias de tu vestido o de la minifalda que te has plantado. Ni es el momento, ni el lugar. Deben fijarse en ti por tu estilazo, pero no por lo que enseñes: he ahí la cuestión. No debemos pasarnos con las lentejuelas, los 'print animal' y los brillos. Ante la duda, los tonos neutros, o el siempre acertado 'black&white', serán tus mejores aliados ya que son discretos y fáciles de combinar, además de una solución que deja poco espacio al error. Y el LBD (Little black dress), la prenda que nunca falla (a no ser que haya un 'dress code' escrito que diga lo contrario). Así pues, si elegimos un tejido liso, la nota de color la pueden añadir los complementos.

Los monos son un gran acierto, al igual que unos bonitos 'palazzo' son nuestros preferidos si te decantas por no lucir pierna.

Como siempre digo, la clave está en los complementos. La fuerza de los complementos puede hacer especial un look, por este motivo hay que prestar mucha atención a los detalles. En zapatos, bolsos o joyas podrás añadir ese toque más atrevido que no debes dar a la ropa que elijas para la fiesta de Navidad de la empresa. En estos accesorios, los brillos, los estampados y la originalidad tienen más cabida. Eso sí, solo el resto del look es básico, sencillo, y es lo que pide la ocasión.

Ya sabéis divinas, que no es lo mismo un 'brunch' o un aperitivo (cada vez son más habituales las comidas de Navidad de empresa) que un cóctel a media tarde o una fiesta de noche. Así que tenedlo en cuenta a la hora de elegir el look. También el sitio en el que se celebra te puede dar pistas a la hora de acertar con el 'dress code', ya que no es lo mismo que se trate de una cena en un hotel de lujo, que un aperitivo o picoteo informal en el local de moda. Eso si divinos, disfrutad del evento!!!!!